Que hablen los documentos
Por Ottokar, 17 de enero de 2005
Con ocasión del fallecimiento el pasado día 1 de enero de D. Federico Suárez, uno de los sacerdotes del Opus Dei de los primeros tiempos y capellán de la Casa Real española, apareció en el suplemento religioso “Alfa y Omega” del diario ABC, un artículo en el que el historiador Luis Suárez recuerda algunas facetas de D. Federico.
Al leerlo me han venido a la cabeza algunas reflexiones sobre la forma en que se ha escrito la historia del Opus Dei.
Refiriéndose a su faceta de historiador, que D. Federico Suárez compartía con el autor del artículo, dice éste:
“Desde muy pronto enseñó a amigos, y luego discípulos, dos lecciones que no deben olvidarse nunca: como historiador, el respeto a la verdad tal como aparece plasmada en los documentos, insistiendo en acogerse a las noticias de que se dispone y no, como ahora es por desgracia muy frecuente, acomodando dichas noticias a la tesis que se quiere demostrar; como sacerdote, que esa misma verdad, comunicada por Dios mediante la fe, es el instrumento integrador de la libertad. [...] Prescindiendo de opinones que ya entonces predominaban, él trato de hacer hablar a los documentos.”
Al leer este párrafo, y al hilo de los recientes correos en la página sobre el ejercicio del periodismo siendo miembro del Opus Dei, me he preguntado cómo valorarán los miembros del Opus Dei cuya dedicación profesional sea la historia, la manera cómo se ha escrito la historia oficial de la Obra.
¿Qué opinarán sobre la praxis de “reescritura” de la historia de la Obra llevada a cabo a base de cambiar páginas de documentos internos, de eliminar fotos y referencias de los que se marcharon o de aquello que ya no interesa que aparezca?
¿Qué valor documental darán a las películas del fundador cuando Satur cuenta que él es testigo de cómo se retocó una película cambiando las palabras que Don Alvaro había pronunciado?
En el mismo sentido de “hacer hablar a los documentos”, Luis Suárez escribió un artículo (ABC, 5-oct-2002) reseñando el libro “Fuentes para la historia del Opus Dei”, en el que alababa la publicación de “documentos y textos, que fueron pensados para instrucción de los miembros, en un uso por así decir limitado, se convierten ahora en bien común, acceso directo, a fin de que los historiadores contemporáneos -y cualquier persona, culta, naturalmente- puedan extraer las oportunas consecuencias.” Titulaba el artículo “Una ventana abierta sobre lo que es el Opus Dei”. Y concluía “Son todavía pocos los documentos y textos publicados; por fortuna hay noticias de que es muy abundante la serie de los que, con ocasión del proceso de canonización, y también de otros esfuerzos investigadores, se han recogido. Es importante recomendar a los investigadores que deben ocuparse de tan importante tema, que se atengan al consejo de Ranke: los acontecimientos deben exponerse «wie es eigentlich gewessen», como sucedieron en realidad.”
Estoy seguro de que en este mismo sentido el profesor Luis Suárez apreciará la labor llevada a cabo desde opuslibros para dar a conocer a los historiadores –y cualquier persona – los [[[:Category:Reglamentos ocultos|documentos internos del Opus Dei]] (Vademecums, Meditaciones, cartas, Estatutos y Constituciones) que han servido durante décadas como guía de actuación para los directores de la Obra. De esta forma, no son sólo los testimonios de los ex miembros los que hablan. Hablan también los propios documentos.
Tras la canonización del fundador, en una recopilación de opiniones en prensa recuerdo haber leído una declaración de Joan Estruch (autor de “Santos y Pillos. El Opus Dei y sus paradojas”) en la que decía que esperaba que tras la canonización se abrieran para los investigadores los Registros y el Archivo Histórico de la prelatura. Sinceramente me parece bastante iluso. No sé si a D. Federico Suárez y al profesor Luis Suárez, como historiadores, les parecería bien que hoy no estén disponibles para los propios miembros de la Obra las cartas fundacionales. Pero tengo la impresión de que el Opus Dei no va a facilitar el acceso al archivo histórico a nadie más que a sus historiadores oficiales. Quizás los historiadores tengan que recurrir a opuslibros para poder exponer los acontecimientos “...«wie es eigentlich gewessen», como sucedieron en realidad.”
Los análisis basados en los documentos internos que han realizado E.B.E., Compaq & Brian, José Antonio, Hormiguita y otros, demuestra la profundidad y el entendimiento que puede conseguirse cuando quien analiza los documentos internos ha vivido como miembro de la Obra la praxis resultante de los mismos. Se han escritos trabajos excelentes pero pienso que con el material ya disponible queda aún muchísimo por hacer. Aunque el Opus Dei se empeñe en escribir su propia historia basada en la manipulación y la ocultación interesada debemos esforzarnos en ¡que hablen los documentos,... y las personas que los vivieron! La verdadera historia del Opus Dei no podrá escribirse ya sin contar con los testimonios y escritos de esta página, opuslibros.