Cuál es la verdad del Opus Dei?

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Por Daniel M., 19.03.2007


Acabo de leer la "correspondencia" del viernes 15 de marzo. Una serie de réplicas contrarias a la opinión de Pacífica. Espero que no se sienta molesta por el número de respuestas y porque se dude en general de su opinión. Al menos que no le moleste mi carta porque la considere equivocada al creerse con "vocación de cooperadora".

Pienso que ella nos ha dado su experiencia -que no quiero dudar es la realidad que ahora está viviendo-. Pero los que le hemos replicado también aportamos nuestra realidad, bastante distinta a la suya.

Parece que al igual que se plantea John Allen en su libro "Opus Dei" estamos de nuevo en otro caso de diferencia de posturas tan irreconciliables entre unos ex-miembros y otros, y con los que aún siguen siendo miembros del Opus Dei.

¿Cúal es la verdad sobre el Opus Dei, el ingreso en la institución, la vida en ella y la posterior salida? quizás, no se pueda decir blanco o negro de forma radical, sino más bien señalar una extensa gama de grises. Ese gris de cada caso, será en algunos, próximo al negro y en otros oscilará hacia el blanco. ¿Será el caso de Pacífica un gris de tono próximo al blanco? ¿Será tan bonita su situación, tan inmaculada como nos lo presenta? ¿Será más el deseo personal de ella que sea así que la propia realidad?

Porque para la institución no es de la "familia". Aunque sea "cooperadora" y a pesar de que no exista más familia que la de los hijos de Dios. Le deseo de todas formas lo mejor. Y si quiere contactar conmigo para contestarme, autorizo al webmaster a que le de mi cuenta de correo. Esto dispuesto a un intercambio de ideas positivo.

Pienso que en el Opus como en toda institución formada por personas, habrá aspectos positivos y otros negativos (o, al menos errados). Algunos de los que critican esta web, generalizan considerando que en ella sólo se denigra al Opus Dei. Está claro que para enaltecerlo, el mismo Opus Dei invierte numerosos medios (páginas web oficiales, de simpatizantes, blogs, libros, universidades, etc...) silenciando otras realidades.

Pues bien, como la realidad (toda ella) no es nunca monocolor (ni negro ni blanco absoluto), para completarla está esta página. Labor mejor o peor desarrolada pero que nadie más hace (bueno, alguno más en EEUU e Iberoamérica).

La labor de esta página es una especie de lucha de David contra Goliat. Y "David" no tiene más que ir contando las "pequeñas cosas" de ese funcionamiento de la Institución que nunca salen a la luz... y son tan reales y ciertas como las otras que ellos promulgan a los cuatro vientos.

He aquí expuestas algunas de esas "pequeñas cosas" quizás mejorables:

  1. Captación sin información de lo que es una vocación a la vida consagrada (que esto es lo que son, consagrados en las obras, laicos en las palabras y las normas) Confusión en los "pitables" generada por creerse el Opus Dei "laicos" cuando su "Regla de vida" es la misma de lo que fueron antes, un instituto secular, o sea una vocación consagrada. Proponen al que captan algo "laical" pero les dan realmente algo "consagrado".
  2. Falta de información sobre las diversas vocaciones en la Iglesia -no distinguen nunca entre lo que es ser consagrado de lo que es ser laico, y menos de lo que es ser laico y ser laico-consagrado del Opus Dei.
  3. Desconocimiento práctico de que cada vocación es personal, y que cada cristiano tiene vocación, sin valorar esa vocación si no es la "específica" al Opus Dei. Diferenciación errónea entre vocación "específica" o "peculiar" (la presuntamente "laica" del Opus Dei) y "no hace falta vocación específica" (supuestamente la del resto de los laicos cristianos).
  4. Falta de información sobre los estatutos que no se traducen a las lenguas vernáculas pese a que la Iglesia si ha traducido la Biblia, los documentos del Concilio Vaticano II y su propia página web. Algunos después de 15 años desconocíamos lo que dicen dichos Estatutos, y ni sabemos cúal es la traducción exacta, completa y literal de las "Preces".
  5. Modificación del "catecismo de la Obra" considerados de igual valor que los Estatutos, cuando jurídicamente no pueden serlo jamás. Modificación de la normativa que regirá la Obra efectuada sin la supervisión de la autoridad superior de la Iglesia que desconoce oficialmente dicho "catecismo".
  6. Extremada jerarquización interna, de manera que a los de la base -pese a tener supuestamente la misma vocación- no se les informa ni aporta nunca ninguno de los libros internos -vademecuns o experiencias- que les regulará en su vida en el Opus Dei. La base está sólo para obedecer y si cuestiona algo, para callar.
  7. Ignorancia sobre como dirigir realmente a un miembro cuando este manifiesta de manera constante que no puede ajustarse a la exigente Regla de San Josemaría (porque su vocación es laical y no consagrada). Se propone primero seguir antes de evaluar que, simplemente, esa persona no tiene dicha vocación.

Sin embargo, no quiero acabar sin decir brevemente lo que veo de bueno en el Opus Dei, para que no digan que no soy objetivo. Por supuesto, esto y otras cosas ya lo dice la propia Obra en sus numerosos medios de comunicación y publicación (webs, libros, centros, etc)

  1. Intentan amar a Dios sobre todas las cosas, mediante una vida de piedad muy reglada, sacrificada, de vida vocacionalmente consagrada a Dios. Y esto hasta el extremo de poner en juego la propia salud.
  2. Desean sinceramente acercar el mayor número de almas a Jesucristo para que éstas se salven.
  3. Son fieles a las enseñanzas de Jesucristo tal como están transmitidas por la Iglesia y el Sumo Pontífice. Anhelan conocer la Verdad y transmitirla a los demás.
  4. Y en casos individuales, y también algunos orgánicos, crean y constituyen asociaciones, instituciones para ayudar a los demás. Porque no todo son clubs, colegios, EFAs... etc.

Todo esto que que se dice pronto, es mucho. No quería limitarme a decir sólo lo errado, tenía que aportar también lo positivo de la institución pues si no ¿porqué habría estado en ella tantos años? Nadie está tanto tiempo en una asociación si no es porque en su momento, se vió cosas positivas en ella que aún sigue habiendo.


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